Si algo callé, es porque entendí todo...

Me callo porque el silencio me gusta.
porque me hace tararear sin pensarlo...
me callo porque otros ya han hablado.
Porque no me interesa jugar.

Porque me cansé de ser siempre la que habla para conciliar.

Porque no necesito insistir en nada.

Me callo además porque no me atrevo a romper el silencio... Y también me callo porque no podrían escuchar, aunque quisieran.


Me callo porque sería un alivio escuchar una voz que no sea la mía. Y esperar oír lo que piensan los demás, esos que siempre han callado.
Esta vez simplemente me callo porque no tengo nada que perder. Porque no quiero generar conflictos, porque hablar tarde no sirve.
Me callo porque me consuela.


Me callo, porque muchas veces no me parece apropiado lo que se dice y me callo, otras, porque prefiero escuchar lo que yo misma me digo!!!! o me callo porque estoy cansada de tener que explicar, lo que nunca se entendio.

Porque es mejor simplificar lo complejo y porque no quiero alimentar posibles rencores.


Porque prefiero abrir la boca para reír, porque en silencio pienso mejor y porque espero que alguien, en algún lugar esté haciendo lo mismo.

Me callo porque nunca quise hacer daño y mucho menos jugar.



Porque no quiero complicar a nadie, porque no quiero complicarme. Y entiendo que se hayan generado mil confusiones, pero ya no importa. Es todo comprensible. Porque yo sí entiendo.
Y me callo porque no espero respuestas...

Aunque me gustaría oírte de nuevo.

Entonces sé que me callo por puro desahogo.
Porque el silencio me refugia.
Por eso, mejor, hoy simplemente me callo.